Los textiles ignífugos se han convertido en un elemento en diversos sectores, como el textil del hogar, ropa de cama, eventos, médico, confección, industria, interiorismo, arquitectura y hostelería, gracias a su capacidad para reducir las posibilidades de incendio y aumentar la seguridad. El creciente reconocimiento de los peligros de incendio ha subrayado la importancia de que tanto los productores como los consumidores comprendan las características y ventajas de estos textiles. Con la expansión del mercado de telas ignífugas, es vital tener en cuenta los elementos al elegir opciones de primer nivel que cumplan con las normas de seguridad y ofrezcan calidad y resistencia duraderas.